En un giro polémico, el diputado Johannes Kaiser presentó un proyecto de ley que ha generado un gran debate en Chile, buscando reponer la pena de muerte para quienes asesinen a Carabineros, miembros de la Policía de Investigaciones (PDI) o de las Fuerzas Armadas. Este proyecto recibió una aprobación masiva en la cámara baja del país, destacando la firme postura de defender a las fuerzas del orden ante el creciente problema de violencia contra ellos.
El contexto de la propuesta
Kaiser, quien promueve la medida como parte de un paquete legislativo que incluye también la ley de uso de la fuerza y la ley de inteligencia, argumentó que esta iniciativa envía un mensaje claro y contundente: el Estado debe estar dispuesto a responder de manera firme ante aquellos que desafían su autoridad y cometen crímenes contra los agentes encargados de la seguridad.
«Tenemos la obligación de decirle al pueblo de Chile que lo vamos a defender por todos los medios necesarios, también eliminando legalmente, después de un debido proceso, a quienes han cometido los peores delitos que uno puede imaginarse», destacó Kaiser en su intervención.
Reacciones y controversias
El proyecto ha suscitado opiniones divididas entre los diferentes sectores de la sociedad chilena. Algunos consideran que esta medida es una respuesta contundente ante la creciente violencia contra las fuerzas de seguridad, mientras que otros advierten sobre los riesgos de una pena de muerte en un contexto de derechos humanos y debido proceso.
Este tipo de iniciativas continúan generando controversia y preocupación tanto en Chile como en el ámbito internacional, respecto al uso de la pena capital y su impacto en el sistema judicial y en los valores democráticos.